¡Enmarcábamos nuestra actividad política en los límites de la democracia...! Pues, se ha demostrado que ello supone una gran ventaja para los que no la respetan... ¡Ingenuidad!... Un magnífico corsé en favor de los políticos sinvergüenzas... Aquí la democracia, para ellos, ha jugado el mismo papel que tradicionalmente la religíón (en nuestro caso, la Iglesia) para los poderes fácticos... En nuestros días, ¿para qué iban a querer ni necesitar la religión los "trileros" políticos del momento, si les vale igualmente los llamados principios de la democracia?
Y ¿cómo éstos "revientan" la democracia?... Los escraches públicos y privados, la demonización de otros partidos, la teórica "libertad de expresión" del pueblo en la calle, el acopio de medios de comunicación e información, el fomento del miedo y la pobreza, los derechos humanos a su medida, etcétera, son sabiamente manejados, dada su gran experiencia en la algarada callejera, verdaderos agitadores de las masas que siempre han vivido a la sombra del partido, profesionales de la política, su única ocupación...
Ahora sí, tienen justificaciones de todo tipo que hasta parecen de buena fe (aunque coincidentes con las de los mafiosos de la droga y la prostitución): ¡Si no lo hacemos nosotros, lo harán otros!
Circunstancias históricas como la independencia americana, puso la "libertad" en un alto pedestal... así que el sistema político de EE.UU, elaborado en la sublevación contra la metrópoli, tuvo muchos aires de liberación, una exaltación de la misma, la emancipación... a la que contribuyeron la evolución de revoluciones como la francesa, la inglesa de Cromwell y otras (no la de los soviets, totalmente distinta)...y acorde con su poderío económico (superpotencia) acabó exportando su sistema democrático al mundo. Las democracias "sui generis" acompañaron el proceso (aún cuando la mayoría de naciones, en ningún modo puedan considerarse democráticas), sobre todo en países de la órbita occidental. Y, precisamente, estos sistemas son el verdadero caldo de cultivo donde el comunismo se mueve a sus anchas, aprovechando las fisuras de esos sistemas democráticos, sus libertades y su frágil defensa interna del sistema... Al final, tras años del verdadero "espejismo" de la democracia nos encontramos con la cruda realidad de siempre ¡el poder por el poder!, imponiéndose primero con sutileza, después descarnadamente, con violencia, sin disfraces... ¡Y en eso estamos"
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